Tener fecha para la celebración de un juicio de naturaleza laboral puede demorarse en Valencia hasta un año y medio. Los juzgados de lo Social de la ciudad siguen viviendo una “situación complicada” pese a los cuatro jueces de refuerzo de que disponen. Esta dotación extraordinaria ha logrado “reducir algunos meses” los señalamientos, pero aún hay casos en los que la espera llega al año y medio, “lo que no es aceptable”.
Este fue el diagnóstico que hizo el decano de los jueces de Valencia, Pedro Viguer, sobre la problemática de estos juzgados. Sus palabras durante la presentación de las estadísticas de los juzgados de la ciudad correspondientes al primer semestre de este año muestran una saturación que, si bien ha ido poco a poco a menos, tiende a estabilizarse, lo que sigue provocando demoras en los juicios.
Entre enero y junio de este año se han presentado en los juzgados de Valencia 9.178 demandas laborales, un volumen similar al de años anteriores por esas fechas. En todo el año 2015 se registraron 18.542, un 11,9% menos que el ejercicio anterior. En 2012 y 2013 se llegó a las 24.000, pero la auténtica avalancha se produjo en 2009, con el inicio de la crisis económica, cuando se superaron las 28.000 demandas.
“Se ha producido una cierta estabilización tras el boom de hace unos años por despidos, expedientes de regulación de empleo y sanciones”, explica la diputada de la Junta de Gobierno del Ilustre Colegio de Abogados de Valencia (ICAV) Pilar Colomer. “Se respira un poco más, también gracias a la diligencia de los secretarios, que hacen malabarismos para encajar las fechas”, añade.
Colomer, que también es especialista en Derecho Laboral, explica que, por ley, tienen prioridad para ir a juicio las demandas por despidos, vulneración de los derechos fundamentales y conciliación de la vida familiar. “Después viene otro paquete relacionado con las reclamaciones de cantidad”. Estas últimas suponen ya el grupo más numeroso, con el 25,25% del total de demandas, frente al 24,46% de los despidos de hasta 10 demandantes, según los datos del primer semestre de 2016. “Desde mi perpectiva particular como abogada, hay un descenso en el número de despidos y quizá más reclamaciones de cantidad y sanciones. Antes había una barbaridad de demandas por despidos”, sostiene Colomer.
En su opinión, “teniendo en cuenta el volumen de demandas” que sigue habiendo en los juzgados de lo Social de Valencia, que las fechas para juicio se demoren hasta un año y medio puede ser aceptable, porque se dan en cuanto hay un hueco disponible, aunque para el usuario de la Justicia lo aceptable es cuanto antes, afirma. En la ciudad de Valencia hay 17 juzgados de este tipo (aunque uno se dedica a ejecutorias), lo que da una idea del volumen de asuntos que llegan a tramitar a diario estos órganos judiciales.
Un refuerzo de cuatro jueces
Los juzgados de lo Social de Valencia disponen de cuatro jueces de refuerzo para atender el volumen de demandas laborales. Según Colomer, el “nivel” de estos magistrados se ha notado, para bien, en su funcionamiento.
Fuente: 20minutos.es
